lunes, 9 de mayo de 2011

7 poesías

I.

Bruma del mar,
bruma de espuma.
Hija del mar y del sol,
deja la sal en la arena como única huella imborrable.
Bruma que alguna vez fue mar,
que alguna vez fue ola mezclada con sal.
Bruma que vuela hacia el cielo como simple nube de vapor.
Bruma que enceguece al marinero y hace ver al ciego el mar.
Bruma cargada de aroma,
arrastrada por el viento costero hacia algún lugar.
Bruma que nace y que muere
y vuelve a nacer...




II.

Hojas como cartas,
cartas como hojas,
ambas con mensajes,
mensajes con historias,
historias que dejan huellas,
huellas que dejan marcas,
marcas que dicen cosas,
cosas que traen recuerdos,
recuerdos que traen las cartas,
cartas que trae el viento,
viento que trae hojas.




III.

Volando en un mar de sueños
en los que me sumerjo con profundidad
y nado hasta evaporarme.




IV.

Déjanos bailar una noche,
déjanos volar en sueños de sonrisas.
Déjame llevarte con la brisa,
déjame volar junto a ti como peces de colores
en el mar de nuestros sueños.

Volar como peces en sueños de sonrisas.




V.

Mareados por el mar de las palabras que atravesamos día a día,
Cientos de mares,
Otros mares...
día a día...
otros mares,
otras sales...
otras vidas...




Ciclotimia

El cuerpo siente la profundidad,
se deja llevar por ella.
Sus fuerzas por salir se agotan.
Siente la humedad.
La oscuridad ya casi no la deja ver.
El cuerpo femenino se hunde
como en arenas movedizas.
La humedad le brota de los ojos,
le brota de su pecho.
Su cuerpo se moja.
Se ahoga en su humedad.
Su respiración se enlentece.
Sus párpados se cierran ya sin fuerzas.
El cuerpo blanco,
húmedo
e invadido por la oscuridad
vuelve a tocar fondo.




poesías editadas en “Poetas y Narradores Contemporáneos 2008”. Editorial de los Cuatro Vientos.

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